25. Y... adjudicado, verdaderamente adjudicado (Primera parte)

Buenas noches, pequeños sacos de coágulos.

Esta semana traemos las tres primeras páginas de una historieta bastante especial, que mezcla humor, terror y… “modernidad”. Las dos primeras cosas son bastante obvias, teniendo en cuenta que fue publicada originalmente en la revista Madhouse, una copia de la famosa MAD que contenía historietas que se burlaban de los cómics de horror. Tan solo duró 4 números, y este fue el cuarto de ellos.

En cuanto a lo de “modernidad”, me refiero a que existe en esta historia una clara intención de reflejar la manera de actuar de la juventud de la época. Como no tiene fácil traducción, hemos optado por mantener en inglés algunas de las palabras del slang (dialecto) utilizado, y adaptar libremente los diálogos (bueno, esto lo hacemos siempre…), pero es importante que el lector sepa que la historia se burla de un tipo de personas muy concretas de los años 50: los entonces llamados hipsters o bob-kats, jóvenes de raza blanca que presumían de su afición por el jazz y la cultura negra, sin saber muy bien por dónde les daba el aire, por pura pose. Los (desonocidos) autores de esta historia ridiculizan a este falso aficionado a la cultura, más interesado por su aspecto, por la moda y el dinero que por la música o la cultura.