En Un hombre feliz mandan su título, los tiempos vacíos, algunas miradas aguantadas en exceso y cierta tensión que, algunas veces, se respira en el ambiente. La inocencia de este personaje nos regala una visión sencilla de nuestro entorno… Esto es así, claro, siempre que no nos interrumpa “el payaso Patricio” con su actitud rebuscada, humana y superficial. Por lo demás todo sucede con habitual y monótona normalidad…
Su autor, junto con otros titiriteros, enloquecen en La Livingston.
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…“los actos nobles” no terminan de ser como uno esperaba…a veces, un hombre feliz actúa según un extraño código del honor.
Este tipo tiene la misma aptitud que “Birdman of Alcatraz”, bueno, no se si tiene capacidad, pero buena disposición, seguro!! . (risis)
…nunca debemos olvidar que “un hombre feliz” apenas tiene virtudes, pero tampoco defectos destacables.
Un breve momento de libertad da sentido a una desoladora eternidad.
¿Es este el tema subyacente?
…desde el punto de vista del pajarito, creo que no. Pero no deja de ser una ineresante interpretación del cuento.