Hoy: ¡Salvemos el planeta!

¿Sabes que hay un montón de cosas que puedes hacer para salvar el planeta? Pequeños gestos que tú puedes hacer para contribuir a ayudar al medio ambiente. ¡Compártelos con tu familia y tus amigos y entre todos haremos un mundo mejor!

- NO TE LAVES: Piensa la cantidad de agua que utilizas cada día lavándote las manos, los dientes, en la ducha… Al pasar un mes sin lavarte el cuerpo humano desarrolla una capa autoprotectora de mugre aceitosa muy práctica que te permitirá vivir perfectamente sin ducharte. Si alguno de tus padres no comprende este gesto y te obligan a ducharte, mientras estés debajo del agua grita constantemente: “¡ASESINOS!¡ESTÁIS ASESINANDO EL PLANETA” salpicando todo lo que puedas hasta que cesen en su actitud irracional. También contribuirás muchísimo utilizando todos los días los mismos calcetines y los mismos calzoncillos.
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– BEBE SÓLO REFRESCOS: Otra excelente manera de ahorrar agua. Los refrescos tienen la cantidad suficiente de líquido como para permitirte sobrevivir y como ya están preparados no derrochas nada. ¡Magnífica idea!. Los helados y los polos también son una maravillosa fuente de líquidos.

– NO UTILICES EL COCHE: La atmósfera está contaminadísima por culpa de los tubos de escape. Camina y utiliza la bici todo lo que puedas. Si tus padres y tus vecinos se niegan a hacer este pequeño gesto, pínchales las ruedas de los coches para que no los puedan mover y ya acabarán dándote las gracias.

– RECICLA: Separa la basura de tu casa y recuerda bien dónde tiene que ir cada cosa. Acuérdate que hay un contenedor para el cristal, otro para el papel y el cartón, el rojo para los envases de yogures de fresa, el arcoiris para el de los envases de los otros yogures, el marrón para las cáscaras de los frutos secos, el naranja para las bombonas de butano, el blanco para las lavadoras, neveras y secadoras, el amarillo con lunares lila para los calcetines y las botellas de champú, el de rayas de cebra para las uñas de las manos y el de estampado de leopardo para las uñas de los pies. ¡No te equivoques!.

– TEN LA TELE ENCENDIDA TODO EL DÍA: La luz roja de la tele gasta mucho y encenderla y apagarla todo el tiempo necesita demasia energía. Escoge un canal –a ser posible de dibujos animados– y tenlo encendido todo el día a un volumen constante (preferentemente altísimo para no tener que subirlo cuando echen algo que te apetezca ver especialmente) y no permitas que nadie lo apague. Con las consolas puedes hacer lo mismo.

– DESENCHUFA TODO CUANDO NO LO ESTÉS UTILIZANDO: Mucha gente apaga la tele y desconecta los cargadores. Pero eso no es suficiente…cuando estés a punto de salir de casa desenchufa la nevera, que consume muchísimo. También tus padres se opondrán a eso (porque estropeará todos los alimentos que haya dentro y haréis un charco gigante en la cocina cada vez que salgáis) pero es por su bien. ¡Peor es malgastar energía!.

– AHORRA AIRE ACONDICIONADO: Simplemente, cuando te marches de casa deja abiertas todas las puertas y ventanas. Crearás una corriente fresquita que evitará que tengas que utilizarlo. Además, a la vuelta es muy posible que os hayan robado todo lo que tuvierais. Así que pensadlo bien… sin lavadora, sin televisiones, sin equipo de música… ¡ahorro extra!

– AHORRA CALEFACCIÓN: Utiliza el ecológico sistema que viene utilizando el hombre desde el principio de los tiempos: Haz una hoguera en el salón con periódicos y muebles y ya verás cómo te lo agradecerán tus padres y tus vecinos. ¡Qué calentitos!.